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La pareja perfecta

De: Susanne Bier

La pareja perfecta es una miniserie con grandes estrellas y una directora prestigiosa. También tiene temas recurrentes de la ficción actual y se encuadra  en un género a la moda. Cuando se ve tan claramente el armado de una producción, es posible que esta sea más un estudio de mercado que una obra interesante. La protagonista de esta película con muchos personajes es Amelia (Eve Hewson) una joven que está a punto de casarse con Benji Winbury, un miembro de la familia más rica de Nantucket, Massachusetts). La pareja no tiene la aprobación de su matriarca, la exitosa novelista Greer Garrison Winbury (Nicole Kidman). Pero las tensiones de esta familia de clase explotan por los aires cuando se encuentra un cadáver  en la playa durante el armado previo a la boda. Esto revela todos los secretos y la miseria familiar, al mismo tiempo que todos se convierten en sospechosos.

La pareja perfecta del título alude a la que conforman Greer con su marido Tag Winbury (Liev Schreiber) un millonario empresario. La joven que aparece muerta en la playa, encontrada por la propia Amelia, es su amiga Merritt, dama de honor de la boda. A partir de la investigación del crimen se empezará a conocer mucho sobre la familia y los vínculos entre todos los invitados. Básicamente se trata de un whodunit bastante convencional, algo que se ha multiplicado en los últimos años en las películas y las miniseries. Y por supuesto, también a la moda, la miniserie aprovecha para descargar su furia contra la clase alta. Clase a la que pertenecen no sólo los personajes, sino también los participantes de la serie, por lo que deben saber bien de qué se trata.

La directora danesa Susanne Bier tiene una importante trayectoria en largometrajes, pasando por el Dogma 95 y alcanzando una nominación al Oscar por Después de la boda y finalmente un Oscar y un Globo de Oro por En un mundo mejor. Luego pasó a filmar largometrajes en inglés con actores de Hollywood y el siguiente capítulo ha sido pasarse a las miniseries, con The Night Manager y The Undoing. Para Netflix hizo una película lamentable llamada Bird Box. Si volverá o no a su carrera de cineasta es imposible saberlo, pero hoy por hoy es más sencillo conseguir la aprobación de una miniserie para plataformas que conseguir dinero para un largometraje de cine cuyos espectadores difícilmente lleguen a compararse con los que terminan viendo La pareja perfecta. 

El problema de la miniserie, más allá de los lugares comunes de la ficción actual, está en que al mostrarse como whodunit lo único que resta es entender que, como nos enseñó Agatha Christie, la persona responsable del crimen no es la más previsible. En el camino la historia destroza a la familia, los amigos, los ricos y nos deja sólo algo de simpatía y esperanza en los que no son ricos. Es su tesis y la respetamos, pero más allá de la puesta en escena prolija, no hay nada en esta historia que consiga ser relevante y trascendente. Es más difícil hacer películas de cine que miniseries y la respuesta también se ve en los resultados.