Dahomey es un documental dirigido por Mati Diop, coproducido por Francia, Senegal y Benín. Dura sesenta y siete minutos y es más que evidente que le sobra por lo menos un tercio de ese tiempo total. Por estrategia de venta, era importante llegar a ser un largometraje y tal vez eso explica el alargamiento innecesario. Lo que cuenta es la restitución de veintiséis tesoros reales del Reino de Dahomey por parte de Francia a lo que en la actualidad se ha convertido en la República de Benín. Pasó un siglo para que una pequeña parte de lo robado por la Francia colonialista, volviera a su país de origen. La llegada solemne y muy publicitada de estas reliquias produce festejos pero también abre un debate acerca de la cultura local y la relación con Francia y los objetos recuperados.
Luego de varios planos morosos y contemplativos donde igualmente la película debe recurrir a un cartel para explicar lo que pasa, la directora cree que es una gran idea poner una voz en off poética que representa los pensamientos de esos objetos que regresan. Si pasados esos minutos de poesía boba el espectador aún sigue ahí, se encontrará con lo mejor de la película. Un grupo de universitarios realizando un gran debate donde cada uno presenta sus argumentos a favor o en contra de este acto tan significativo. Los argumentos, que se contraponen entre sí, recuperan un elemento que parece olvidado en el mundo actual: la capacidad de discutir civilizadamente sobre un tema, logrando que del debate surjan ideas interesantes y las partes se escuchen mutuamente.
La película ganó el León de Oro en el Festival de Berlín, algo que sólo puede explicarse por la culpa y el terror que tienen los países europeos al confrontar estos temas. En el contexto actual, una pequeña película con varias limitaciones pero con un tema así, pica en punta para ganar cualquier premio. De eso nadie se hace cargo y nadie criticará con demasiada dureza a una directora que decide elegir este tópico. Dahomey podría pasar sin pena ni gloria en otro momento, pero hoy es un producto perfecto para vender en los países de Europa.