Series

Mil golpes

De: Steven Knight

Mil golpes (A Thousand Blows) es una serie cuya primera temporada tiene seis episodios. Bien al estilo británico, estos pocos episodios contienen una enorme cantidad de material, tanto que al terminar el sexto episodio las posibilidades a futuro permiten pensar en varias temporadas más. Pero quien no tenga interés en pasar los próximos años viendo Mil golpes, puede estar tranquilo que con lo que ofrece acá hay bastante para entretenerse y al mismo tiempo abrir el deseo de conocer más. ¿Más sobre la serie o más sobre las historias reales detrás de ella?  Ambas cosas.

En la fascinante Londres victoriano, alrededor de 1880, transcurre la historia de Mil golpes. Dos amigos recién llegados de Jamaica luchan por sobrevivir en esa ciudad cosmopolita, violenta y atrapante a la vez, uno de ellos, Hezekiah Moscow (Malachi Kirby), tiene destino de grandeza. Pero su camino lo cruzará con Henry “Sugar” Goodson (Stephen Graham) el peleador más poderoso del boxeo clandestino del East End londinense. Esta parte de la ciudad está habitada también por un grupo de criminales conocido como Forty Elephants, cuya líder es Mary Carr (Erin Doherty). En ese mundo de boxeo, marginalidad, violencia y crimen se desarrollan los episodios de esta miniserie que se mueve entre hechos reales y eventos y personajes inventados. La combinación es irresistible.

El creador de la serie es Steven Knight y Mil golpes es promocionada diciendo que es de “los mismos creadores que Peaky Blinders”. Pero Knight es mucho más que esta legendaria serie, aunque es evidente la conexión entre ambas. Knight también ha escrito muchos guiones de cine de diferentes estilos y ha demostrado una pasión enorme por la Inglaterra victoriana al adaptar a Charles Dickens en dos ocasiones: Un cuento de Navidad (2019) y Grandes esperanzas (2023). El espíritu dickensiano en la descripción de la ciudad de Londres se ve en Mil golpes. Pero además la serie incluye no solo a los mencionados personajes reales, el boxeador negro, la banda de mujeres, sino también al mismísimo John Douglas, Marqués de Queensberry, uno de los creadores del boxeo moderno y sus reglas. Esa transición entre las salvajes peleas ilegales y los más civilizados combates con guantes aparece en la serie.

Stephen Graham es uno de los productores, por eso no es raro que aparezca él, quién también trabajó en Peaky Blinders, sino actores que trabajaron en otras series y películas producidas por él, como El chef y Adolescencia. Acá su rol es un poco secundario, aunque igualmente importante. Él representa la parte más violenta de la serie, aunque hasta ahora no llega a los extremos de Peaky Blinders, famosa por su excesiva y gráfica violencia. Lo único que detiene un poco la acción maravillosa y lo interesante de la trama son los momentos de discurso político, algo innecesario cuando los propios personajes son en sí dicho discurso. Las razas, las clases sociales y los sexos son el tema de la serie sin que se tenga que aclarar más. En cualquier caso, esta serie, como Peaky Blinders, despierta el interés por aprender más. Es absolutamente imposible no ver Mil golpes y salir corriendo a investigar los temas. Cada uno de los personajes merece su propia serie, por lo que si todo sale bien, habrá varias temporadas por delante.