Breve historia del planeta verde es una película acerca de la amistad. Tania es una chica trans que hace shows en discos de Buenos Aires; Pedro es una criatura de la noche y Daniela acaba de romper una relación amorosa que la dejó en una profunda melancolía. Los tres son amigos de toda la vida emprender un viaje cuando Tania se entera que su abuela ha muerto.
Pero al llegar a la casa, les espera una sorpresa: la abuela tuvo de manera oculta un amigo, ese amigo, atención, es un extraterrestre. Un simpático alien ahora congelado, pero compañero fiel de la abuela fallecida. Lo que parecía una película más del cine argentino, sufre en ese momento un giro y cambio de género espectacular.
Los protagonistas, aun cuando sus actuaciones son muy desparejas, son queribles y la locura de que esta road movie con un alien la convierten en una rareza a tener en cuenta. Por momentos cómica y por momentos emotiva, la historia tiene algunos momentos algo flojos, pero algunos de completa originalidad. El promedio da una película que no consigue despegarse del todo para transformarse en un clásico de culto. Pero no hay mucho para reclamarle, porque el riesgo si bien no es un bien en sí mismo, suele hacer que las películas sean más interesantes.