Cujo, un amable perro San Bernardo, persigue a un conejo hasta una cueva, donde un murciélago rabioso le muerde el hocico. Mientras tanto, la familia Trenton, el ejecutivo de publicidad Vic (Daniel Hugh-Kelly), el ama de casa Donna (Dee Wallace) y su hijo Tad (Danny Pintauro), llevan su automóvil a la casa rural del mecánico abusivo Joe Camber (Ed Lauter) para algunas reparaciones. Allí descubrimos que Cujo, quien es la mascota de la familia Camber. El hijo de Camber les dice que no le tengan miedo al perro, que es inofensivo.
Donna se da cuenta de la nariz mordida de Cujo, pero le da poca importancia. Más tarde, el matrimonio de Vic y Donna se pone a prueba cuando Vic se entera de que Donna está teniendo una aventura con su ex novio de la escuela secundaria, Steve Kemp (Christopher Stone), mientras que la publicidad de Vic para un anuncio de cereales está fallando. Charity (Kaiulani Lee) y Brett (Billy Jacoby), la esposa y el hijo de Joe salen de la casa durante una semana para visitar a la hermana de Charity, Holly. Cuando la infección por mordedura vuelve loco a Cujo, mata a su vecino alcohólico, Gary Pervier (Mills Watson), y a su dueño Joe (quien es atacado antes de que pueda llamar a las autoridades).
Cujo transcurre en el pueblo de Castle Rock, lugar inventado en las ficciones de Stephen King y donde transcurren varios de sus libros. En la escena inicial vemos como Cujo, un amable San Bernardo, persigue a un conejo hasta una cueva donde es mordido por un murciélago con rabia. Lastimado, Cujo vuelve a su casa pero no se ven todavía indicios de algo grave, solo la marca de la mordida. El perro vive en una casa con la familia Camber, conformada por un mecánico violento que tiene aterrada a su esposa e hijo.
Otra familia, el matrimonio de Vic y Donna, se pone a prueba cuando Vic se entera de que Donna está teniendo una aventura con su ex novio de la escuela secundaria, Steve Kemp (Christopher Stone), mientras que la publicidad de Vic para un anuncio de cereales está fallando por un escándalo con el producto. Su hijo Tad (Danny Pintauro) está asustado porque dice que hay un monstruo en su ropero, pero sus padres le explican que los monstruos no existen. La tensión de ambas familias es el centro de la trama, aunque los principales protagonistas sean finalmente Donna y Tad. Y Cujo, claro está.
Esta película de terror encaja perfecto en el universo de Stephen King y la descripción de los pequeños pueblos que aparecen en sus libros. Para cuando el terror propiamente dicho explota, ya hemos conocido el drama de todos los personajes y aquello por lo que están atravesando. Como suele ocurrir en el género, son esas situaciones el caldo de cultivo para que el terror crezca, se vuelva más cercano y nos afecte más. A eso hay que sumarle que, más allá de cierta exageración, la película no obedece a reglas de terror sobrenatural, sino más de temores vinculados con la naturaleza fuera de control, como Tiburón en otras películas de animales asesinos. La magia del cine permite que nos asuste una mascota que al comienzo de la película es completamente adorable.
Cujo pertenece al comienzo del furor por Stephen King en el cine. Luego de dos adaptaciones separadas entre sí Carrie (1976) y El resplandor (1980), en 1982 comienza una seguidilla de adaptaciones, la mayoría famosas, de los libros del escritor. En 1983 Cujo, La zona muerta y Christine compartieron año de estreno. Aunque Cujo nunca tuvo el prestigio de otras adaptaciones, tal vez sea hora que nos la tomemos un poco más en serio. Quienes busquen una película de horror con efectos especiales y una trama complicada, acá podrán salir decepcionados. Pero la descripción de la vida de los personajes previas a la irrupción del horror es impecable, semejante en muchos aspectos a Dolores Claiborne y cuando la película entra en su parte principal también logra su objetivo. La tensión y el suspenso son realmente fuertes y no hay nada tranquilizador en gran parte de la película. La violencia y el encierro son intensos. Posiblemente menos amable que el terror controlable de un villano o un monstruo inventado. Que la mascota de una familia sea un asesino sangrienta da por tierra con una de las pocas certezas que podría tener un ser humano. Dee Wallace realiza una actuación enorme en el rol de Donna y Stephen King consigue que la película termine mejor de lo que lo hacía el libro, según sus propias palabras.