The First of the Few es un film británico estrenado en septiembre de 1942 y al año siguiente en Estados Unidos con el nombre de Spitfire y España con el título de El gran Mitchell. A Latinoamérica llegó con el título de Por un ideal. Este pequeña guía es para encontrarlo más fácilmente y reconocer que estamos hablando del mismo clásico. The First of the Few es uno de los film británicos más queridos de aquellos años y tuvo una enorme repercusión en el público de Gran Bretaña. La historia tiene muchos niveles de emoción diferentes, todos vinculados con lo que se estaba jugando el mundo en la Segunda guerra mundial. Pero además su protagonista y director, fue una figura clave en la historia de su país, no solo por lo que transmitió en sus películas, sino por su condición de agente del gobierno tratando de ayudar al esfuerzo de guerra a pedido del mismísimo Winston Churchill.
Leslie Howard se había convertido en una estrella internacional luego de su trabajo en Lo que el viento se llevó, aun cuando ya tenía varios títulos valiosos en su carrera. Pero con la llegada de la guerra, Howard se enfocó en hacer películas vinculadas con la temática afín de concientizar a la población acerca de los riesgos que corría su país y el mundo. The First of the Few es, en ese sentido, su máximo legado como artista y hombre de la democracia. En la película que él mismo dirigió, interpreta a R. J. Mitchell, ingeniero aeronáutico y patriota, destacado en la historia por haber sido el creador de Supermarine Spitfire. El Spitfire fue un avión monoplaza creado en Gran Bretaña que tuvo el mayor número de producción y el único del ejército aliado que se fabricó durante toda la Segunda guerra mundial. Su diseño innovador fue una revolución en la historia de la aviación en general.
La película comienza en pleno conflicto bélico. El 15 de septiembre de 1940, durante la Batalla de Gran Bretaña, el Líder del Escuadrón de la RAF Geoffrey Crisp (David Niven), el comandante de la estación de un escuadrón Spitfire, cuenta la historia de cómo su amigo, R. J. Mitchell (Leslie Howard) diseñó el caza Spitfire. Sus pilotos escuchan cuando Crisp comienza con la competencia del Trofeo Schneider de 1922, donde Mitchell comenzó su trabajo más importante, diseñando aviones de alta velocidad. Mientras observa gaviotas con sus binoculares, imagina una nueva forma para los aviones en el futuro. Crisp, un ex piloto de la Primera Guerra Mundial que busca trabajo, cautiva a Mitchell con su entusiasmo y el diseñador promete contratarlo como piloto de prueba si su diseño alguna vez entra en producción.
The First of the Few sigue las aventuras de estos dos amigos, el genio de Mitchell y la lealtad de Crisp. A medida que van rompiendo las reglas conocidas y logrando una revolución en el diseño de aviones, el mundo empieza a torcer su destino hacia el totalitarismo. Viajan a Italia y Alemania en la década del treinta y observan la amenaza que se cierne sobre Europa y el mundo. Mitchell ya no se conforma con hacer un diseño que cambie la aviación, también se da cuenta que Alemania está construyendo una fuerza bélica sin precedentes. Así es que inicia su lucha para despertar la conciencia de su propio país, aun con dudas acerca de la política con respecto a los alemanes.
Mitchell trabajó por diseñar el Spitfire hasta el último día de su vida. Enfermo de cáncer, siguió adelante para que Gran Bretaña y sus aliados tuvieran un avión capaz de enfrentar a sus posibles enemigos en una Segunda guerra mundial. Cuando murió, en 1937, toda la base del Spitfire ya había sido creada, sin él el avión simplemente no existiría. La película cuenta su vida y su compromiso, lo hace con el estilo del film biográfico clásico, con drama y convicción, pero sin ponerse solemne. Un joven y encantador David Niven en el papel de Crisp, aporta humor a la trama y la aligera un poco. Leslie Howard por su parte entrega una convicción que se puede ver en cada segundo que él está en la pantalla. La película logra hacerle entender al espectador todo lo que Mitchell era y lo fascinante que fue el trabajo de él como ingeniero.
Mitchell murió joven, a los cuarenta y dos años. Leslie Howard también, a los cincuenta. El 1 de junio de 1943, el vuelo civil de 777-A de British Overseas Airways Corporation que viajaba de Lisboa a Bristol fue derribado por ocho aviones de combate alemanes. Entre las diecisiete víctimas que conformaban la totalidad del pasaje del avión hubo varios nombres notables, entre ellas Leslie Howard. Hubo muchas teorías acerca del derribo del avión civil y los motivos. El propio Winston Churchill creía que los alemanes pensaban que él viajaba en el avión y por eso lo derribaron. Varios coinciden con esta teoría. Otros piensan que Leslie Howard era espía británico y parte del objetivo al atacar al avión. Una última teoría, la más absurda pero relevante al hablar de cine, es que asociaban a Leslie Howard con R.J. Mitchell porque en Lisboa se había estrenado la película. Y el rumor en las calles llevó a un improbable error. Biógrafos posteriores establecieron que Leslie Howard no era un objetivo.
Su muerte prematura es una de las muchas víctimas de la Segunda guerra mundial. Su compromiso con su país fue tan fuerte como el del personaje de la película con la que se despidió para siempre de su público. Howard, como Mitchell, no ha sido olvidado. Se le han rendido homenajes y su familia mantiene vivo su espíritu hasta hoy. Documentales y libros se han multiplicado a lo largo de los años. En 1947 The First of the Few volvió a estrenarse en Gran Bretaña. Sin duda es emocionante la famosa frase de Winston Churchill que cierra el film y explica su título: “Never was so much owed by so many to so few” (nunca tantos les debieron tanto a tan pocos). Pero no es solo ese vínculo el que le da valor a la obra, también es una gran película.