En un futuro cercano el mundo está en guerra. Seis soldados son enviados a una misión suicida a través del mar helado para transportar un paquete que podría poner fin al conflicto, inclinando la balanza por uno de los dos bandos. Los soldados solo pueden atravesar la extensa superficie de hielo con patines, porque la capa es muy fina y no soportaría otro peso. No saben que es lo que llevan, pero sí saben que es la diferencia que lo cambiará todo. Entre los soldados está la protagonista de la historia, Caroline (Noomi Rapace), de quien sabemos fue separada de su hija años atrás y acepta la misión con la promesa de reencontrarse con ella.
Como se ve en el resumen de la película, Cangrejo negro cumple con una historia de militares en una misión imposible. Nadie se sorprenderá de las vueltas de tuerca que surjan y de que algunos de ellos puedan quedar en el camino. La acción de la película está bien planteada y el patinar de noche por grandes extensiones de hielo permite que gran parte de la película no requiera mucho presupuesto. A medida que avanza la trama hay un despliegue mayor y gana en acción y tensión. Incluyendo sus arbitrariedades y momentos menos efectivos, la película alcanza una buena dosis de tensión, primero con los peligros que ofrece el hielo y luego cuando la protagonista se enfrenta a un enemigo aun mayor. Noomi Rapace, estrella del cine sueco conocida en todo el mundo, es el rostro ideal para llevar adelante esta pequeña pero sólida película de acción.