Cazador de demonios (The Bondsman, Estados Unidos, 2025) es una serie de ocho episodios de corta duración producida y protagonizada por Kevin Bacon. Una precisa y divertida combinación de géneros que antes de que pueda volverse rutinaria llega al final de la primera temporada. Una combinación de western contemporáneo, film noir, terror satánico y música country. También con algo de humor y drama familiar. Cómo si Justified hubiera sido escrita por Sam Raimi. Por supuesto, la serie permite el lucimiento de su protagonista, que realiza acá un gran trabajo.
El cazador de recompensas Hub Halloran (Kevin Bacon), tras ser asesinado, es resucitado por el Diablo para capturar a demonios que han escapado del Infierno. Su ex mujer, Maryanne (la cantante Jennifer Nettles), cantante de música country y su hijo, están algo distanciados de él y su madre, ahora jubilada, se dedica a la misma profesión que Halloran. Aunque al principio el cazarrecompensas está confundido por la situación, pronto empieza a entender los cambios en su profesión y los motivos por los cuales ha sido elegido. Además de demonios escapados del infierno, también se enfrentará a la nueva pareja de Maryanne, Lucky (Damon Herriman, no por nada salido de la serie Justified), un personaje violento que quiere sacar a Halloran del medio.
Aunque difícilmente la serie se transforme en un clásico, su trabajo lo realiza correctamente. Retrata el mundo de la América profunda, la violencia, la religión, la música country y los conflictos familiares. Cazador de demonios muestra también amor por los géneros cinematográficos y la cultura de Estados Unidos. Kevin Bacon es por ese motivo el actor ideal para el personaje. Mientras un demonio es asesinado con una motosierra en una escena, en la siguiente la familia se reúne en el porche a cantar Can the Circle Be Unbroken de The Carter Family. Con sangre, acción, canciones y drama, Cazador de demonios es una de las series más americanas de la temporada, una que no pierde el tiempo en bajar línea ni sentir vergüenza