Cine Argentino

Cortázar & Antín: Cartas iluminadas

De: Cinthia Rajschmir

El cine argentino tuvo muchas etapas. La década del sesenta trajo una nueva generación de realizadores que, con mejores o peores resultados, intentaron cambiar los códigos del cine. Lo mismo pasó en todo el mundo. El final del período clásico fue seguido por otro de experimentación e innovación. En muchos casos estos films pasaron por un costado de la historia del cine, ya que el cine comercial no dejó de existir en esos años y estas películas no fueron en su mayoría taquilleras. Pero de este cine y estas ideas surgieron futuros avances para el cine en general.

Visto desde el presente, la idea de que Manuel Antín y Julio Cortázar trabajaron juntos en tres films es un lujo que uno quisiera recuperar ya mismo. Con lo popular que es el escritor y con todo lo que hizo el director en las décadas siguientes, es una verdadera joya un documental que recupere esa relación y se la muestre a las nuevas generaciones. Antín siempre fue un enamorado de la literatura y Cortázar siempre tuvo un interés por el cine. Cortázar & Antín: Cartas iluminadas muestra a ambos hombres con su obra, sus ideas, su vínculo. Fueron tres las películas que hicieron juntos. La cifra impar (1962), Circe (1964) y Intimidad de los parques (1965) y el propio Antín ha confesado que Cortázar quería hacer más, pero él no tenía el mismo entusiasmo. Está bien, esta trilogía es parte importante de nuestro cine.

La directora Cinthia Rajschmir va mucho más allá de la simple ilustración y consigue editar el material para que no haya un solo momento de más. Todo vale la pena. La siempre interesante Graciela Borges aporta su gracia y sus vivencias, así como el propio Antín es capaz de recuperar lo mejor de la historias. Cortázar, y sus cartas de audio, también son un valioso e irrepetible testimonio. Cualquier admirador del escritor debe ver esta película. Cualquier que crea que el cine argentino son solo un grupo de panfletos perezosos, debe ver esta película y entender que nuestro arte cinematográfico ha tenido todo tipo de exponentes, incluyendo esta sociedad brillante y fructífera.