Bart Bromley (Tye Sheridan, recordado por protagonizar Ready Player One) es un recepcionista nocturno con síndrome de Asperger, poseedor de una gran inteligencia, hace un enorme esfuerzo por abrirse paso en su vida laboral. Pero su costumbre de observar a los demás, en realidad espiar, lo convertirá en el principal sospechoso del asesinato de una mujer en el hotel donde Bart trabaja.
Mientras avanza la investigación policial, llevada adelante por el detective Espada (John Leguizamo) Bart entabla una conexión especial con una huésped del lugar, Andrea (Ana de Armas), pero poco a poco empieza a temer que ella se convierta en el próximo objetivo del asesino que anda suelto en el hotel.
El elenco lo completa nada menos que Helen Hunt como la madre del protagonista y Johnathon Schaech como el marido de la mujer muerta en el hotel. Muchos nombres y caras conocidas que le quedan un poco grande a esta película filmada en Salt Lake City y Provo, en el estado de Utah. La estructura del guión es prolija pero la narración no alcanza nunca el rigor necesario para enganchar al espectador. Y por supuesto el protagonista se ve tentado a hacer un show actoral de esos que ya no querríamos ver.