Tiene que existir un concurso secreto en Netflix en el cuál diferentes países compiten para ver quien es capaz de ofrecer su peor película. Latinoamérica tiene varias naciones compitiendo por tal premio pero Europa no se queda atrás. El otrora idealizado cine del viejo continente es hoy, gracias a Netflix, hundido a través de sus peores productos. Incluso las películas más simples y comerciales del viejo cine francés, son obras cumbres de la cinematografía mundial en comparación con artefactos horribles como Las chicas de Niza (Nice Girls, Francia, 2024). A lo largo de la historia del cine han existido premios a lo peor del cine de cada año. Suelen ser premios tontos y muchas veces sin riesgo, pero incluso dichas premiaciones muestran un nivel de interés superior a lo que se vive hoy. ¿Alguien dice que estos bodrios que llegan al top ten de las plataformas son inmirables? No, sólo aparecen notas diciendo lo que no te podés perder de la nueva película que arrasa en Netflix y otras aclarando con euforia que la película dura tan solo noventa minutos. El espectador clickea y el resto es historia. Las chicas de Niza no debería cargar sobre sus hombros la muerte del amor por el cine, pero al menos seamos justos y digamos que es fea, mala, aburrida y sin gracia, para evitar así que alguien pierda su vida. Cada uno que haga lo que quiera, pero esto no es el cine, esto es otra cosa.
Las chicas de Niza es lo que se conoce como buddy movie, una película de pareja despareja de amigos. Desde comedias a películas de acción, el género ha demostrado ser taquillero, divertido y ha dado toda clase de dúos legendarios. En este caso el género es policial de acción con comedia. Una mujer policía de Niza, Léo (Alice Taglioni), que se autodefine como la mejor oficial del lugar, investiga la sorpresiva muerte de su compañero y amigo Ludo en Hamburgo. Pero su jefa le asigna la quiere correr del centro de la escena y suma a la investigación a la policía alemana Mélanie (Stéfi Celma). Como corresponde al género, primero se pelean y luego se vuelven socias que intentan resolver una trama mucho más compleja de lo que parece. Basta la escena inicial para entender que es una película intolerable. Pero sólo se puede criticar lo que se ve, así que les confirmo, es horrible hasta la mismísima escena final, donde quieren impostar una alegría que la película no nos ha podido transmitir ni por un instante.
Una buddy movie se sostiene por la química de sus protagonistas y ya es obvio que eso acá no existe. Pero hay que admitir que hay algo de talento en Alice Taglioni, capaz de presentar el personaje menos agradable que ha dado el género. No hay escena donde esté ella en la cual uno no quisiera estar viendo otra película. Es una especie de milagro adverso de la anti fotogenia. Stéfi Celma se lleva mejor con la cámara pero no puede tener ningún vínculo positivo con el guión. La directora Noémie Saglio demuestra que hoy la balanza se está equilibrando y que las peores películas pueden estar dirigidas también por mujeres, no sólo por malos cineastas hombres. El título original, Nice Girls, no solo juega con el nombre de la ciudad, sino que además remite directamente a Dos tipos peligrosos, cuyo título original era The Nice Guys. Esa película del 2016 era una comedia de acción y una perfecta buddy movie protagonizada por Russell Crowe y Ryan Gosling. Solo resta reconocerle una cosa a Las chicas de Niza y es que realmente está filmada en Niza. Quien esté pensando en viajar, puede usar este horrendo google maps para ver como es el lugar.