Modo supervivencia es la primera película para Netflix realizada en Quebec, Canadá. Hablada en francés y con la promoción habitual que el servicio de streaming le hace a sus productos, la película parece tener más relevancia de la que finalmente posee. El problema de Netflix es que las buenas películas parecen estar de relleno y las mediocres están siempre en primer plano. Tal vez no sea siempre así, pero eso parece.
En medio del duro invierno en las montañas de Quebec, un grupo de personas están en un campo de entrenamiento de supervivencia. El instructor les cuenta de la importancia de conocer cómo sobrevivir en caso de que el mundo colapse. Según él, eso ocurrirá sí o sí, por el cambio climático, por una epidemia, por lo que sea, pero el mundo no durará.
Los siete personajes que están en el campamento aprenden cosas y al mismo tiempo bromean y la pasan bien. Pero algunas pequeñas señales indican que algo, para bien del guión, deberá pasar. Y pasa, entonces lo que parece un simple campamento se transforma en otra cosa. La trama es previsible, completamente rutinaria y salvo un par de golpes de efecto no tiene ningún interés. Si no fuera estrenada en Netflix esta película no tiene posibilidad alguna de interesarle a nadie. No pasaría jamás por los cines y si estuviéramos en la época del video sería ese fondo de catálogo de una editora de segunda línea. Nada para ofrecer, excepto un poco de nieve y un par de paisajes.