David Copperfield es la octava novela de Charles Dickens. Su título completo es The Personal History, Adventures, Experience and Observation of David Copperfield the Younger of Blunderstone Rookery (Which He Never Meant to Publish on Any Account). Fue publicada inicialmente en episodios entre 1849 y 1850 y como novela en 1850. Se trata de una historia de aprendizaje narrada casi en su totalidad en primera persona y es uno de los clásicos más influyentes de la literatura universal.
Como gran parte de la obra de Charles Dickens, fue adaptada al cine y la televisión en numerosas ocasiones. Debido a la extensión del libro, siempre le quedó más cómodo el formato de miniserie. Dentro de la obra del autor es considerada la que mayor cantidad de elementos autobiográficos posee, aun siendo una ficción producto de la imaginación de Dickens y no una verdadera biografía. Algunos de los eventos que lo marcaron y dieron pie a muchos de sus libros, aquí aparecen de forma más reconocible.
En esta nueva versión realizada en el 2019 y estrenada en cines en el 2020 se destaca el elemento autobiográfico de David Copperfield, como para marcar un paralelo con la vida de Charles Dickens. En la escena inicial de lo ve presentando la historia en un teatro, tal como lo hacía el escritor con algunos de sus libros. El guión, por suerte, se toma muchas libertades, le quita una buena parte del drama y, sin idealizar las tristezas del protagonista, termina construyendo una comedia.
El director y guionista juega con las diferentes capas de la historia. Mezclando el relato el autor con las escenas, otorgándole a todo el film una marcada modernidad que se va volviendo más sutil con el correr de los minutos, además de que los espectadores nos vamos acostumbrando al juego. Lo mismo pasa con el Color-blind casting de la película, es decir la elección de los actores sin importar la raza. Esto, que es un arma de doble filo, aquí funciona bastante bien, entre otras cosas por el tono de la película. Dev Patel como David Copperfield compone un papel brillante y el resto del elenco está lleno de grandes estrellas británicas. La raza se vuelve algo secundario por mérito del realizador, los actores y la historia. No es demagogia, las cosas funcionan bien y resultan sanamente divertidas en esta comedia con los personajes de Charles Dickens.
Al protagonista lo acompañan varios grandes como Peter Capaldi, Hugh Laurie, Tilda Swinton, Ben Whishaw, Daisy May Cooper, Rosalind Eleazar, Benedict Wong, Nikki Amuka-Bird, Darren Boyd y Gwendoline Christie. El humor de Dickens aquí adquiere una dimensión cercana a la de la obra de Armando Ianucci, creador de la serie Veep y director de otra gran comedia llamada La muerte de Stalin. Para agradecerles a los admiradores de Dickens por haberse tomado tantas libertades, el guión incluye varias citas a otros textos del autor, un pequeño juego para seguidores fieles del escritor.
No existe tal cosa como demasiadas adaptaciones de Charles Dickens. Pero a esta altura hacer una versión muy ajustada al original es una repetición sin vida propia. Por eso es bueno que una película como The Personal History of David Copperfield tome algunos riesgos y cumpla con Dickens, pero también con el cine. Sus recursos modernos logran combinarse bien con la historia. El resto es una aventura divertida y graciosa. Un poco de riesgo, un poco de drama, bastante humor y una historia que vale la pena volver a escucharla en este film de época pero que se nota que es muy contemporánea.